Todas las personas somos diferentes. Y gran parte de esas diferencias son consecuencia de nuestra personalidad. Si bien es verdad que existen rasgos en una persona que ya vienen como herencia, hay también una influencia del medio en el que fuimos criados. Por eso la Dra. Blanca Almeida nos habla acerca del tema en el capítulo “El ambiente de crianza y la personalidad”. Del Podcast “Hablando del alma y sus tropiezos”.
Diferencias desde el embarazo
Existen madres de todas las edades, posición económica, profesión, nacionalidades, etc. A cada una de ellas el embarazo le llegará de diferente forma. Esto influye en cómo son criados sus hijos y cómo será el desarrollo de los mismos. Todas estas circunstancias alrededor de la madre pueden afectar a los hijos.
Cada uno de nosotros tenemos una historia, una circunstancia, bajo la que nacimos. Eso hace que tengamos un tipo de personalidad. En conjunto con lo que vivimos en el ambiente en el que nos vamos desarrollando.
Mamás adolescentes
No es lo mismo un bebé de una madre adolescente en cuya familia le mostraron apoyo, la ayudaron, la alentaron a seguir desarrollando su vida. Familias en las que las abuelitas se vuelven las mamás y las mamás pasan a ser las hermanas. A la contraparte; cuando la adolescente es rechazada por su familia, le piden que aborte, la corren de su casa. Es una chica conflictuada. La mamá no está segura de sí misma, no tiene una red de apoyo. La seguridad para la madre (o la falta de ella) tendrá consecuencias en el bebé.
Y esto ni siquiera tiene que ver con el amor que la madre le tenga. Puede ser que en ambos casos la mamá de verdad ame a su bebé, pero las circunstancias son más o menos favorables. Y desde el embarazo el bebé puede sentir la felicidad o la angustia que la madre está experimentando.
Hijos muy planeados
Otra diferencia que podemos ver es cuando una pareja que ha deseado un hijo por mucho tiempo, al fin lo tiene. Tanto lo han deseado que incluso puede ser sobreprotegido. Mucho amor también sofoca. Las circunstancias de ese embarazo serán distintas a las de otros embarazos.
También hay niños que son adoptados. Los padres han deseado tener un hijo sin lograr un embarazo. Ese deseo se puede ver culminado con la adopción. Pero las circunstancias también serán distintas al caso anterior. Pues si bien ambas familias deseaban mucho un hijo, ambas familias planearon tenerlo, la forma en la que se dio es diferente y conlleva a reacciones distintas que los niños pueden percibir.
La crianza en medios poco favorables
Si nacemos bajo circunstancias donde hay mucha violencia. Que la mamá está en un barrio rodeada de delincuencia, armas, etc. Aunque la mamá intente alejarnos de eso, el medio terminará teniendo un impacto en nosotros.
Lo mismo pasa si crecemos con padres alcohólicos o dependientes a alguna droga. Nuestra forma de percibir el mundo será diferente pues aprenderemos a que la tranquilidad de nuestro día dependerá de si nuestros padres beben o no. Si consumen drogas o no. Posiblemente seremos más cautelosos, callados, temerosos.
Codependencia
Esta se da cuando como niño dependo del estado de ánimo de mi mamá y papá. O de nuestros cuidadores. Los niños codependientes son niños que despiertan y si ven que mamá amaneció muy bien, entonces saben que será un buen día. Si amaneció triste, enojada. Si papá tomaba, si se enfurecía, entonces los niños saben que será un mal día. Causa mucha inestabilidad porque el estado de ánimo depende de los padres. Es más difícil aprender el proceso para regular las emociones, pues los niños no se encuentran en un ambiente que les proporcione seguridad.
Cuidador primario
El ser humano es muy sensible. Le impacta cómo se sintió la mamá, bajo qué circunstancias vivió y hasta quién lo cuidó. Cuando hay muchos cuidadores el niño crece inseguro porque tiene diferentes reglas y límites con cada persona que lo educa. Es importante tener un cuidador primario. Que haga sentir al niño seguridad, que le haga saber que esa persona no se va a ir.
¿Cómo ser la mejor mamá?
Ser mamá es muy difícil. Es un trabajo de tiempo completo que puede volverse agotador. Antes de tener un bebé, revisemos si tenemos las condiciones adecuadas para recibirlo. Estabilidad emocional, económica. Los bebés no le dan estabilidad a un matrimonio. Si la pareja está inestable, un bebé no es la solución.
Y si ya tenemos a nuestro bebé y queremos que crezca sano, lo primero que debemos hacer es dejar de compararnos. Saber que somos las mejores mamás para nuestros hijos. Analizar cómo nos encontramos. Qué nos hace felices, si tenemos objetivos, si podemos dar amor, si estamos resentidas con nuestro pasado. De esta forma podemos buscar ayuda si es necesario. Es una responsabilidad muy grande. El ser humano es la especie que más cuidados necesita y más tiempo tarda en independizarse de la madre. Por eso es importante la salud emocional de la mamá para lograr que el niño se desarrolle de la mejor forma posible.
Y ¿qué hago si mi entorno no fue el mejor en mi infancia?
El que hayamos crecido en un ambiente poco favorable no significa que no podamos cambiar y trabajar en ello. Podemos asistir a terapia para cambiar esa visión del mundo. Para dejar de arrastrar esos miedos que traemos desde la infancia.
La crianza influye, pero no significa que ya como adultos no podamos cambiarlo. Podemos ser felices si sanamos lo que nos sucedió en el pasado. Hagámonos responsables. Los papás no tienen toda la culpa de lo que pasó. Y aún si decidimos creer que nuestro pasado es su culpa, de acuerdo. Pero como adultos nos corresponde a nosotros mismos sanarnos.
Cuando nos ponemos en el papel de víctima, sólo estamos usando esta excusa. Nuestros padres nos dieron lo que pudieron con lo que tuvieron. Y si vamos a juzgarlos también juzguemos todo aquello que hicieron bien. Aquello que sacrificaron para lograr darnos lo que necesitábamos. No sólo veamos los errores que cometieron.
No quiero tener hijos, ¿soy egoísta?
Por el contrario; es responsable. Si decidimos no tener hijos, también es respetable. Si sabemos que no es la mejor opción para nosotros, sicreemos que un bebé nos vendría a restar o creemos que no tenemos las herramientas. Es mejor ser conscientes y tomar nuestra propia decisión de forma consciente.
Esperamos que hayas encontrado puntos interesantes. Recuerda que puedes escuchar el capítulo completo y también todos los demás Podcasts que tenemos disponibles para ti. Porque las decisiones que tomamos en la vida, serán la causa de lo que nos depare el futuro.