¿Qué pasa en nuestro cuerpo cuando pensamos?

¿Qué pasa en nuestro cuerpo cuando pensamos?

El escritor estadounidense Stephen Crane dijo que “quien puede cambiar sus pensamientos puede cambiar su vida”. Así de importante es todo lo que pensamos. Por eso en el capítulo “¿Qué pasa en nuestro cuerpo cuando pensamos?”, del Podcast “La llave del éxito en tu hogar”, los Lic. Edith Bravo y Leopoldo Franco nos hablan acerca del poder de la mente. Y todo lo que podemos lograr por medio de nuestros pensamientos.

Ser conscientes de qué pasa cuando pensamos

¿Alguna vez has pasado tiempo recordando momentos vergonzosos que te pasaron? Si lo has hecho tal vez pudiste notar que esa incomodidad que experimentaste hace mucho o poco tiempo, volvió a ti. Lo mismo pasa si recordamos momentos tristes, felices, de enojo. Por supuesto depende la forma en la que recordemos las cosas. En qué centremos nuestra mente. Pero el hecho de que podamos lograr volver a sentir lo que sentimos hace tiempo demuestra el poder de la mente. 

Seguramente alguna vez has oído hablar de la Adrenalina, Endorfinas, Serotonina o Dopamina. Pues estos son nombres de algunos de los muchos Neurotransmisores que se producen en nuestro cerebro. Sirven para transmitir la información de una neurona a la otra y así generar impulsos en nuestros músculos, nervios, etc. 

Cuando recordamos algo triste y comenzamos a llorar, sucede a consecuencia de la liberación de neurotransmisores que envían esta señal al cuerpo. Al nosotros comenzar a recordar o fijar nuestro pensamiento en algo, nuestro cerebro sigue ese mismo proceso: Libera estas sustancias que transmiten la información y generan una reacción en nuestro cuerpo.

Entonces sólo pasa con los recuerdos

No. Lo mismo pasa con los pensamientos presentes. Todo aquello en lo que fijemos nuestra mente va a generar una reacción en nuestro cerebro que liberará sustancias para transmitir la información al resto del cuerpo. Por ello la forma en que pensemos será lo que definirá como vivimos.

He ahí la importancia de aprender a colocar los pensamientos correctos en nuestra mente. Pues si todo el tiempo hay negatividad en nuestro cerebro, los neurotransmisores que se liberen serán aquellos que no nos hacen sentir tan bien. Y la reacción en nuestro cuerpo será cansancio, estrés, dolor, enfermedades, etc. Si queremos cambiar eso en nuestra vida, lo primero que debemos aprender a cambiar, es la forma en como pensamos.

Pero yo no puedo pensar de otra forma

La manera en la que pensamos, hablamos, nos expresamos, nos vestimos, nos vemos, la aprendimos. Por supuesto que hay cosas inherentes a cada persona como el carácter, los gustos, la personalidad. Pero la forma de pensar no. Esa la aprendimos en base a nuestras experiencias de vida. A lo que nos enseñaron nuestros padres, maestros, hermanos y demás personas a nuestro alrededor.

Y así como la aprendimos, podemos desaprenderla. Sustituirla por una nueva forma de pensar. Aprender a ver las cosas desde otra perspectiva. Entonces no es que no puedas pensar de otra forma. Simplemente aún no te han enseñado cómo hacerlo.

¿Cómo puedo empezar a pensar diferente?

Bien, ya aclaramos que es posible cambiar nuestra forma de pensar. Ahora te decimos cómo podemos iniciar:

  • Lo principal es querer hacerlo. Si no estamos dispuestos a intentarlo, entonces es una batalla perdida. Las ganas de querer lograr un cambio son el primer paso. Abrir nuestra mente a nuevas oportunidades.
  • Tomar consciencia. Una vez que tenemos las ganas, es necesario que nos conozcamos. Estamos tan acostumbrados a pensar de una forma que lo hacemos en automático, sin siquiera darnos cuenta que lo hacemos. Tomémonos el tiempo de analizarnos. La introspección es clave.
  • Sé paciente. Llevas toda tu vida pensando de la forma en que lo haces, no esperes cambiarlo de un día a otro. Todo lo que vale la pena, toma tiempo.
  • Pregúntale a tu mente. Siempre que queramos recibir respuestas podemos preguntárnolas a nosotros mismos. Nuestra mente es mucho más sabia de lo que creemos. 
  • Pide ayuda. Todos somos distintos. Algunos podrán realizar este proceso solos y otros necesitarán guía. Si sientes que te cuesta hacerlo solo; acércate a alguien que pueda ayudarte.

Diferencia entre gastar e invertir el tiempo

El tiempo va a seguir corriendo ya sea que decidamos invertirlo en algo útil o que lo gastemos en no hacer nada de provecho. Y el pensar también puede ser un gasto o inversión de tiempo. Por ejemplo; podemos invertir nuestro tiempo pensando en conocernos a nosotros mismos o gastarlo en criticarnos de forma destructiva. Tú decides si quieres gastar o invertir. Pero recuerda; si solo pensamos en el problema no dejamos espacio para pensar en la solución.Esperamos que hayas encontrado información útil para tu vida diaria.

Si quieres conocer más acerca de qué pasa cuando pensamos, te recomendamos que escuches el capítulo completo. También recuerda que tenemos muchos otros Podcasts disponibles para ti. Porque el tiempo que pases haciendo algo que te ayude a crecer emocionalmente, será siempre tiempo bien invertido.

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